En México la casa del siglo XX fue muy rica en expresiones arquitectónicas y tipologías tanto de carácter unifamiliar como colectivo, sin embargo, en estas últimas es donde encontramos las expresiones más genuinas del periodo; en ellas se construyen y se ensayan distintas opciones para dar albergue a las masas que pueblan las ciudades.
Estas arquitecturas fueron expresiones del gusto y de las posibilidades tecnológicas de la época. Durante las dos primeras décadas de le centuria, la herencia del siglo anterior aún era notable en las nuevas casas, pero al concluir la Revolución mexicana, en muy poco tiempo otras arquitecturas ganaron lugar en el gusto de los habitantes.